23/05/2013
A la vista del anteproyecto de la reforma del Código Penal sobre la lucha contra la violencia de género, desde la Secretaría del Igualdad del PSOE de Cieza, se exige al Ejecutivo del PP que cumpla la Ley Integral contra la violencia de género hasta la última coma, que la aplique, y que deje de reducir su presupuesto, pues este recorte de derechos puede llegar a ser mortal para muchas mujeres.
Desde que el PP llegó al poder, hemos asistido a un duro recorte de presupuestos, pero también a un ajuste ideológico que está desprotegiendo de una forma terrible a las miles de mujeres que en la actualidad sufren malos tratos, afirma Nuria Morcillo, quien asegura que la reforma del código penal en lo que a violencia de género se refiere, es la puntilla de los recortes que el PP está llevando contra la Igualdad.
Los y las socialistas denuncian que se trata de una reforma regresiva en los derechos de las mujeres, al tratarse de un ataque a la seguridad y protección de las víctimas y sus hijos e hijas, al eliminar la expresión violencia de género del articulado del Código Penal. Esto hará que la mayoría de los delitos de violencia de género sean considerados leves y prescriban en un año lo que posibilitará a los maltratadores eludir la cárcel pagando una simple multa. La responsable socialista de Igualdad subraya el hecho de que la reforma despenaliza las vejaciones injustas leves, que suelen ser el inicio del maltrato, y desprotege a los menores al dejar de considerar como tipo más agravado que el maltrato se produzca en su presencia.
Sobre la ley Wert, Nuria Morcillo, asegura que elimina la prevención de la violencia de Género desde las aulas, al suprimir la asignatura de Educación para la Ciudadanía y darle prioridad a otras materias. Por todo ello, pide al Gobierno que cumpla la ley integral, y denuncia la desaparición de 8 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado en la partida de prevención de la violencia de género, lo que supone más de un 30% de recortes. Mientras, las víctimas por violencia de género, lamentablemente, siguen sucediéndose una tras otra.